Los insecticidas, asesinos de abejas
Después de analizar más de mil estudios científicos, las autoridades científicas explican que el riesgo contra las abejas es en general y que los resultados varían en función de factores como la especie, o el uso del plaguicida y las rutas de exposición. La agencia, admite riesgos bajos para algunos, pero que, en conjunto, las conclusiones confirman que los neonicotinoides son un riesgo para las abejas. Asimismo indica, que es un organismo dedicado a la evaluación de riesgos y que no toma decisiones sobre la autorización de este tipo de productos regulados, como los pesticidas. Son los estados y la Comisión Europea los que tendrán que tomar medidas.
Por estos días se analizan los gases de efecto invernadero y su negativo rol en el proceso de cambio climático que sufre el planeta. El hecho es que el impacto negativo de la contaminación humana sobre el ambiente, una de las causas del asolador cambio climático que embate a todas las formas de vida del planeta, ha aumentado el riesgo de pérdida de especies y con ello, un fuerte golpe a la economía.
Por estos días la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria confirma que tres polémicos insecticidas neonicotinoides, dígase del imidacloprid y clotianidina, fabricados por Bayer, y tiametoxam, de Syngenta, representan un riesgo para las abejas silvestres y las abejas melíferas. Estos pesticidas, de uso frecuente en todo el mundo en variados cultuivos, están sometidos a restricciones en la Unión Europea desde el año 2013, en aplicación del principio de precaución.
Luego de analizar más de mil estudios científicos, el instituto explica que el riesgo es en general y que los resultados varían en función de factores como la especie de abeja, o el uso del plaguicida y las diferentes rutas de exposición. La agencia europea, admite riesgos bajos para algunos, pero que, tomadas en conjunto, las conclusiones confirman que los neonicotinoides representan un riesgo para las abejas.
La Autoridad indica que es un organismo dedicado a la evaluación científica de riesgos y que no toma decisiones sobre la autorización de productos regulados, como los pesticidas. Son los estados miembros y la Comisión Europea los que tendrán que tomar medidas luego del dictamen.
La función polinizadora de las abejas es sumamente importante en cultivos como la alfalfa, las almendras, y las fresas y en los últimos años, muchos estudios científicos han alertado de la disminución del número de abejas por diferentes amenazas, además del uso abusivo de algunos pesticidas. Se toma en cuenta también la desaparición de su hábitat, además de una avispa asiática invasora que destruye las colmenas, un parásito conocido como Nosepa apis que colapsa su aparato digestivo, y el calentamiento global.
No obstante, los expertos de la Autoridad reconocieron en una cumbre en Bruselas que se desconoce qué está pasando con las abejas, pues es necesario recoger muchos más datos.
En junio pasado se conocieron los resultados del experimento en el campo más extenso hasta la fecha, financiado por los propios fabricantes de los pesticidas, Bayer y Syngenta. Los Investigadores del Centro para la Ecología y la Hidrología de Reino Unido estudiaron más de 2 mil hectáreas de cultivos de colza cuyas semillas se trataron con los insecticidas tiametoxam y clotianidina, en Alemania, Hungría y Reino Unido. El número de abejas y colmenas descendió en todos los países.
Pero en Alemania, no se detectaron efectos negativos y además, la vitalidad de las colonias de abejas melíferas aumentó. Tanto Bayer como Syngenta criticaron las conclusiones del estudio.
El principal autor del trabajo, el entomólogo Ben Alex Woodcock, explicó las ventajas de estos pesticidas, pese a sus inconvenientes pues se dirigen a insectos que dañan la planta y pueden aplicarse en semillas en muy bajas dosis, pero protegen a toda la planta y también reducen la necesidad de insecticidas de amplio espectro pulverizados. Las autoridades deben evaluar estos riesgos y compararlos con los de las alternativas.
La Asociación Europea de Protección de Cultivos, explica a su vez, que no hay pruebas que demuestren que las restricciones a los neonicotinoides hayan tenido un impacto positivo en las abejas en Europa y según esta organización, si finalmente se prohíben los neonicotinoides, la Unión Europea se convertirá rápidamente en un importador neto de maíz, trigo y de otros cultivos básicos.
Una ONG ecologista muy conocida, Greenpeace, pidió al Gobierno español que respalde la propuesta de prohibición de los tres insecticidas neonicotinoides, noción que se votará en Bruselas el próximo 22 de marzo.
