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lunes, 11 de junio de 2018

Un enfoque social sobre la geografía

Por dianell

La concepción más tradicional de la Geografía humana estudiaba los aspectos físicos de la tierra y excluía al hombre de sus estudios. Posteriormente pasó a ser una ciencia del territorio que refleja la distribución de los fenómenos sociales. Como disciplina se encarga de estudiar las sociedades humanas desde una óptica espacial, es decir, la relación entre estas sociedades y el medio físico en el que habitan, así como los paisajes culturales que éstas construyen.

Lamentablemente en la comunidad científica no existe un consenso acerca de cuál debe ser el objeto de estudio de la Geografía Humana. Algunos contemporáneos piensan que solo en la geográfica regional deben estudiarse los hechos humanos; otros plantean que los hechos humanos carecían de la cientificidad del carácter físico.

Desde la perspectiva sociológica es de gran interés el espacio vivido, pues este no es independiente del propio sujeto y de la sociedad en que se inserta, sino un medio en que se desarrolla la vida humana; no es independiente de la sociedad que lo ocupa. Atendiendo a lo planteado la Geografía Humana, debe entender al espacio geográfico como en constante construcción, a partir de la relación dialéctica con la sociedad que lo habita. En la sociedad cubana actual, cuestiones como el desarrollo desigual, los procesos de diferenciación espacial y la relación entre los grupos sociales y las instituciones deben ser el eje central de esta ciencia, aplicada a nuestro contexto.

El espacio geográfico es un sistema de formas, objetos, fijos y acciones, funciones, flujos en permanente interacción. Es un producto social, algo en permanente construcción mediante una relación dialéctica con la sociedad que lo habita. Se diferencia del territorio ya que este responde a criterios políticos- administrativos o zonas económicas, mientras que el espacio geográfico responde a criterios sociales que incluyen la utilidad que le da la sociedad a dicho espacio, la función que cumple para las personas que lo habitan y la valoración que le dan estas personas, entre otras cuestiones. En general el sentido del espacio es resultado de la transformación y las experiencias sociales.

Se hace muy importante comprender al espacio geográfico ya que el mismo está mayormente influido por las dinámicas sociales que se dan en él, al ser resultado de un proceso vinculado con el desarrollo de las fuerzas productivas y las relaciones de producción, según Lefebvre. Se puede decir que el espacio geográfico condiciona las dinámicas, aunque de una forma relativa, ya que no podemos generalizar ciertas cuestiones que quedan en la psiquis social. Aunque si vamos a tratar el espacio geográfico como una construcción social entonces se puede afirmar que sí condiciona las dinámicas sociales, ya que la base de ese espacio geográfico como concepto construido socialmente, se encuentra precisamente en las dinámicas de este tipo.

El espacio es un producto social, es una especie de columna para la vida en sociedad pero también condiciona la vida humana y su desarrollo.