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miércoles, 6 de junio de 2018

Albert Pujols, una leyenda viva

Por Aliet Arzola

Los Angelinos de Los Ángeles saben que el contrato de 10 años y 240 millones que firmaron con Albert Pujols no ha sido de gran utilidad para la franquicia en términos deportivos, básicamente porque no han logrado llegar a la postemporada en ninguna de las campañas que el dominicano ha vestido la camiseta roja. Sin embargo, no se puede negar que el inicialista ha mantenido alto el nivel de expectación en el Angel Stadium por sus números ofensivos, de los más notorios de la historia, amén de que hayan descendido en los últimos años.

Pujols es solo uno de los tres hombres que suma más de 600 jonrones (614) y 600 dobles (619), club reservado para las leyendas Hank Aaron y Barry Bonds. Además, el quisqueyano es el noveno que ha sobrepasado las seis centenas de cuadrangulares y el cuarto que con menos edad lo ha logrado, superado únicamente por Alex Rodriguez, Babe Ruth y el propio Aaron. Estos simples detalles son una clara prueba de toda la atención que puede generar Pujols para los fanáticos de los Angelinos, quienes centran sus miradas en él, en Mike Trout y ahora en el fenómeno japonés Shohei Ohtani, quien ha llegado a MLB con el propósito de mantenerse como un jugador de dos vías.

La magia ha acompañado la carrera de Pujols, no solo por haber llegado a 600 jonrones con un grand slam (único que lo ha hecho), sino porque en ese club es el único, junto a Bonds y Alex Rodríguez que ha conquistado al menos tres galardones de Jugador Más Valioso, una prueba de su integralidad e impacto, sobre todo con los Cardenales de San Luis, donde obtuvo sus tres premios. Allí, además, mereció seis Bates de Plata, dos Guantes de Oro, el premio de Novato del Año y nueve incursiones en el Juego de Estrellas, cita en la que repitió hace un par de temporadas, ya con la camiseta de los Angelinos.

Pero ya Pujols no es el mismo, y la cuestión no tiene que ver exclusivamente con su capacidad para mantenerse saludable, aspecto que se señaló como un hándicap desde que firmó su contrato multianual al oeste de Estados Unidos hace ya seis contiendas. Por ejemplo, en las últimas cuatro ha estado muy poco tiempo en la lista de lesionados, pero no ha podido ni acercarse a los números de antaño. Sus promedios de embasado ha descendido dramáticamente y también ha ido en retroceso su movilidad en la inicial, detalles que lo convierten en un jugador promedio con poder al bate. Hombres con estas características se pueden encontrar por montones en la actualidad en MLB, por lo que, para Pujols, es una verdadera fortuna contar con un contrato que le garantizará la paga durante los próximos cuatro años. En otras circunstancias, tal vez quedaría desempleado como el también dominicano José Bautista. No obstante, nadie podrá negar su historial de leyenda, que muy probablemente le permita convertirse en un inmortal del béisbol.