El increíble cereal: Freekeh
Freekeh o farik es un alimento que se consume auténticamente en Oriente Medio; es un tipo de trigo que se colecta antes de la terminación de su evolución de madurez y una vez recolectado se seca al sol para más tarde tostarlo a bajas temperaturas, con el objetivo de conseguir que resulte indicado para consumo humano. Es un popular y añejo plato en varios países de la cuenca mediterránea oriental, de donde provine el trigo duro.
En correspondencia a sus particularidades, se asemeja a la quinoa y al arroz integral, especialmente en cuanto a su empleo en la cocina. Según numerosos estudios, los beneficios que proporciona el freekeh son mayores que cualquier otro cereal, puesto que se cosecha cuando es joven, por lo que el grano almacena un mayor número proteínas, minerales y fibra que el trigo maduro. Sus propiedades nutricionales son insuperables.
Brinda hasta tres veces más de fibra que el arroz integral y el doble que la quinoa. Además, contiene muy pocas grasas insaturadas (tan solo 2,5% contra el 4% de la quinoa). También se caracteriza por la presencia del almidón resistente, el cual es un tipo de carbohidrato que funciona como fuente de fibra y ofrece saciedad. Igualmente consta con un enorme contenido de proteínas (12,7%) y carbohidratos (77%). Del mismo modo lo conforman minerales como el magnesio, el potasio, zinc, hierro, selenio, calcio y vitaminas (A, B1, B2, C y E). Proporciona sólo 339 calorías por cada 100 gramos, por lo que se parece mucho al arroz y la quinoa. Este cereal es bastante homólogo a la de la cebada y su paladar puede ser similar al de los vegetales con un pequeño gusto ahumado.
Desde el Oriente, el freekeh actualmente pretende conquistar Occidente gracias a los seguidores de la alimentación y la cultura biológicas. En este sentido, se presenta de un increíble probiótico que preserva el sistema digestivo y ayuda a desarrollar las defensas del organismo. Otros motivos por los cuales elegir por este nuevo súper alimento son: Su elevado contenido en almidón y fibra, lo que convierten a este cereal en un maravilloso potenciador del efecto de saciedad, lo que acaba siendo muy útil para agregar en las dietas para bajar de peso.
Anexado a lo interior, estaría explicado que el freekeh avasallaría la filtración de grasas al organismo y, en consecuencia, separaría las toxinas del cuerpo gracias a su capacidad antioxidante. Este cereal es una fuente de proteínas completas, porque consta con todos los aminoácidos fundamentales; además se obtiene una mejoría el tránsito intestinal. Por su composición de un gran contenido de fibra, conectado a su supremo aporte de proteínas, el freekeh se trasforma en un gran compañero para conservar un bajo índice glucémico y, por consiguiente, para insertar en la dieta de las personas con diabetes. Varios estudios marcan que su consumo ayudaría en la prevención de enfermedades de la vista, mejora el físico de la piel, las uñas y el pelo gracias a su alto contenido de sales minerales.
Puesto que se identifica por su variabilidad, el freekeh brinda increíbles resultados en platos que proverbialmente se construyen con arroz. En relación a los postres, queda muy bien acompañado de yogur y frutas, inclusive como suplente de los cereales que se consumen regularmente con leche. Conjuntamente, es un maravilloso ingrediente para añadir en las ensaladas.Para su elaboración sólo se requiere el doble de cantidad en volumen de agua o caldo por cada cantidad de freekeh para un tiempo de cocción próximo a los 20 minutos. Cuando el líquido se seca, ya está listo para ingerir. Una de las maneras más sencillas de agregar este alimento a la dieta familiar radica en preparar hamburguesas. Para lograrlo, mezclamos 200 gramos de freekeh anteriormente cocido con un huevo, una papa rallada, una cucharadita de levadura de cerveza y salpimentar al gusto. Una vez que se consiga una masa, darle forma de hamburguesa.
Cocinar al horno unos minutos y añadir con ensalada verde. Quienes quieran elaborar un tabule necesitan: dos tazas de trigo freekeh, 60 ml de aceite de oliva, dos cucharadas de menta fresca, 15 ml de jugo de limón, ¼ de taza de albahaca fresca, tres cebollas de verdeo, ¼ de taza de perejil, tres tomates y sal. Primeramente, cocinar el freekeh y mezclarlo con el aceite de oliva y el jugo de limón. Rápidamente, fusionar hasta que el cereal se halle cubierto del el aceite y el jugo. A continuación adicionar la albahaca, la menta, el perejil y la cebolla de verdeo todo troceado; componer de forma pareja. En último lugar agregar los tomates anteriormente cortados, revestir el recipiente de manera acomodada y dejar reposar 30 minutos para luego servirlo.
